La filmografía con temática de mexicanos emigrados a Estados Unidos o cine chicano será la invitada de honor de la decimoquinta edición de la Muestra de Cine Latinoamericano de Catalunya, que tendrá lugar en Lleida; del 27 de marzo al 3 de abril de 2009.
El cine chicano protagonizará una retrospectiva con seis largometrajes y tres documentales, entre los que se encuentran Raíces de sangre, de Jesús Salvador Treviño, al que históricamente se le reconoce como la primera película chicana.
También se exhibirán El norte, nominada al Oscar al mejor guión en 1984, y American Me, en la que debutó como director Edward James Olmos, acaso el máximo exponente de los actores chicanos, tras alcanzar máxima popularidad protagonizando la serie televisiva Corrupción en Miami.
Olmos protagoniza tres de las películas de las retrospectiva: Zoot Suit, American Me y My family. Entre los documentales destaca Made in LA, ganador de un premio Emmy.
"Chicano", término empleado en Estados Unidos para referirse a los mexicano-estadounidenses, se utilizó al principio para referirse a los habitantes hispanos oriundos de los territorios estadounidenses que pertenecieron anteriormente a México, como Texas, Nuevo México o California.
Luego pasó a definir a los ciudadanos con nacionalidad estadounidense de origen mexicano y a las personas nacidas en Estados Unidos de origen mexicano.
Nacido en la década de los 60, "bebiendo de los movimientos cinematográficos de esos años (Nueva Ola Francesa, Nuevo Cine Latinoamericano), el cine chicano nace como defensor a ultranza de las luchas sociales y políticas encabezadas por el líder agrario César Chávez", recordaron los organizadores de la Muestra.
Los primeros grandes directores del género fueron Luis Valdez, Egrain Gutiérrez, Jesús Salvador Treviño, Lourdes Portillo y Gregory Nava, a quienes se unieron, a partir de los 90, nuevos realizadores como Edward James Olmos y Neil Giménez.
Casi 40 años después del nacimiento del movimiento chicano, "las condiciones de desigualdad y discriminación que motivaron su puesta en marcha todavía permanecen", añadió un comunicado de la Muestra.
Creativo y bien orientado, el cine chicano presenta lo común y lo cercano, la vida del pueblo o del barrio, "como retrato de una sociedad que quiere ver reflejada en la pantalla sus problemas e inquietudes y también su legado histórico cultural", añadió.
Los hispanos, con más de 40 millones, son la minoría más numerosa en Estados Unidos, y de ellos, más de 13 millones son chicanos y con un promedio de edad muy bajo; más de un tercio son menores de 18 años.
La Muestra de Cine Latinoamericano de Lleida (noroeste) se convirtió en esta edición en Muestra de Cine Latinoamericano de Cataluña.
El certamen, que cumple sus 15 ediciones con un balance significativo, lanzó películas de grandes directores latinoamericanos que posteriormente se impusieron con éxito en el circuito comercial, como por ejemplo Nueve reinas.
(Fuente: www.cinelatinoamericano.org)
El cine chicano protagonizará una retrospectiva con seis largometrajes y tres documentales, entre los que se encuentran Raíces de sangre, de Jesús Salvador Treviño, al que históricamente se le reconoce como la primera película chicana.
También se exhibirán El norte, nominada al Oscar al mejor guión en 1984, y American Me, en la que debutó como director Edward James Olmos, acaso el máximo exponente de los actores chicanos, tras alcanzar máxima popularidad protagonizando la serie televisiva Corrupción en Miami.
Olmos protagoniza tres de las películas de las retrospectiva: Zoot Suit, American Me y My family. Entre los documentales destaca Made in LA, ganador de un premio Emmy.
"Chicano", término empleado en Estados Unidos para referirse a los mexicano-estadounidenses, se utilizó al principio para referirse a los habitantes hispanos oriundos de los territorios estadounidenses que pertenecieron anteriormente a México, como Texas, Nuevo México o California.
Luego pasó a definir a los ciudadanos con nacionalidad estadounidense de origen mexicano y a las personas nacidas en Estados Unidos de origen mexicano.
Nacido en la década de los 60, "bebiendo de los movimientos cinematográficos de esos años (Nueva Ola Francesa, Nuevo Cine Latinoamericano), el cine chicano nace como defensor a ultranza de las luchas sociales y políticas encabezadas por el líder agrario César Chávez", recordaron los organizadores de la Muestra.
Los primeros grandes directores del género fueron Luis Valdez, Egrain Gutiérrez, Jesús Salvador Treviño, Lourdes Portillo y Gregory Nava, a quienes se unieron, a partir de los 90, nuevos realizadores como Edward James Olmos y Neil Giménez.
Casi 40 años después del nacimiento del movimiento chicano, "las condiciones de desigualdad y discriminación que motivaron su puesta en marcha todavía permanecen", añadió un comunicado de la Muestra.
Creativo y bien orientado, el cine chicano presenta lo común y lo cercano, la vida del pueblo o del barrio, "como retrato de una sociedad que quiere ver reflejada en la pantalla sus problemas e inquietudes y también su legado histórico cultural", añadió.
Los hispanos, con más de 40 millones, son la minoría más numerosa en Estados Unidos, y de ellos, más de 13 millones son chicanos y con un promedio de edad muy bajo; más de un tercio son menores de 18 años.
La Muestra de Cine Latinoamericano de Lleida (noroeste) se convirtió en esta edición en Muestra de Cine Latinoamericano de Cataluña.
El certamen, que cumple sus 15 ediciones con un balance significativo, lanzó películas de grandes directores latinoamericanos que posteriormente se impusieron con éxito en el circuito comercial, como por ejemplo Nueve reinas.
(Fuente: www.cinelatinoamericano.org)
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