miércoles, 13 de abril de 2011

Cine Latino en la Mostra de Cinema Llatinoamerica de Catalunya (Segunda jornada)



El segundo día de la Mostra también se presentaba interesante, ya no solo por las tres películas que me esperaban, si no también por un corto al que le tenia muchas ganas, El barco pirata.

Uno de los pocos fallos que le encuentro a esta Mostra es que no hay mucho que ver por las mañanas, una película de animación, algún documental suelto, pero poco mas, todo lo importante empieza a partir de las cuatro, así que toda la mañana del domingo la dedique al turismo, a conocer un poco esta pequeña, aunque bonita, ciudad que es Lleida.

Tras ver los puntos de interés que me había fijado, llegó la hora de ver la primera película, La vida útil.

Pero antes de empezar la película de Federico Veiroj, pusieron el cortometraje que mas esperaba antes de llegar a Lleida, el que repasando la programación me causo mayor interés, El barco pirata, dirigido por el español Fernando Trullols.



Y pensareis, ¿por qué le tenia tantas ganas? pues porque este corto esta protagonizado por actores de la talla de Alberto San Juan, Antonio de la Torre o Raúl Arevalo, estos dos últimos dos de mis actores españoles favoritos. Y que decir del corto, pues muy entretenido, bien hecho, exquisitamente interpretado por todo su reparto y con una banda sonora preciosa compuesta por Arnau Bataller. Eso si, lo primero que se me paso la cabeza fue, “así cualquiera”, es que con ese reparto, con los medios que se nota que disponía y ese compositor para la música, ¿qué podía salir?. Difícil era que saliera un mal cortometraje.

La vida útil



Tras finalizar El barco pirata empezó la primera película del día, la uruguaya La vida útil, dirigida por Federico Veiroj, del que se pudo ver en nuestro país su anterior película, Acné.

Jorge (45) vive con sus padres y trabaja en una cinemateca desde hace 25 años. Desempeña tareas técnicas, de programación, y conduce un programa de radio sobre cine. La cinemateca está en una situación cada vez más crítica y Jorge, que nunca ha trabajado fuera del cine, se queda sin empleo. “La vida útil” cuenta cómo Jorge debe cambiar su modo de ser para adaptarse a un nuevo mundo. Quizá el cine lo ayude a sobrevivir, después de todo.

La película, de solo 67 minutos, se podría decir que esta dividida en dos partes, una primera mas interesante donde vemos todo el proceso de desintegración de la Cinemateca de Uruguay y una segunda parte donde el protagonista, dedica todos sus esfuerzos en llamar la atención de la mujer que le gusta. Esta segunda parte es mucho mas floja, aunque tiene cosas rescatables, como sus guiños al cine clásico, incluyendo una banda sonora que evoca al cine de antaño. Como ya he dicho, lo mas destacable para mi, toda la primera parte de la película, que en algunos momentos consigue recordarte por que amamos tanto el cine.

Aquí os dejo una crítica mas detallada que nuestro colaborador Gonzalo Restrepo Sánchez hizo dela película.



Después de terminar se repitió la misma situación del día anterior, salir de la sala para volver a entrar al instante y asistir a la segunda película del día.

Acorazado



Tras este visto y no visto ya estaba otra vez sentado en la sala del CaixaForum para ver Acorazado, película mexicana de Álvaro Curiel e interpretada por Silverio Palacios.

Silverio va a reivindicarse consigo mismo, con su familia y amigos, logrando lo que nadie de ellos: llegar a Estados Unidos y no ser un fugitivo. Con su viejo taxi convertido en balsa y haciéndose pasar por cubano, Silverio se embarca hacia Miami. Sin embargo, no llega a su destino sino a Cuba. El sueño cubano rápidamente supera al americano cuando Silverio es recibido con trabajo, seguridad social y una casa. A pesar de las comodidades, Silverio no quiere tranquilidad, sino dinero y encuentra una manera de conseguirlo que acabará con su placentera vida en Cuba.

A pesar de tener una base argumental muy interesante, con este inmigrante que decide lanzarse al mar para llegar a los Estados Unidos pero que por error llega a Cuba, considero Acorazado como una película fallida, quizás porque durante todo su metraje no parece decidirse en que camino coger, si el de la comedia o el del drama, y quizás esa indecisión es lo que hace que la película no llegue a dar lo que promete, a pesar de la estimable actuación de su protagonista.



Antes de la película pusieron el corto de rigor que acompaña a todos los largometrajes de la sección oficial. En este caso otro cortometraje español, interpretado por una pareja de actores reconocidos, Pilar Castro y Luis Zahera, El premio, de León Siminiani. Interesante, aunque tampoco nada del otro mundo.

La verdad es que tras dos películas interesantes aunque sin un extremo interés, fui a descansar un poco con la esperanza que la película de las diez, y última de la noche, fuera la que le me diera una gran alegría.

El atentado



Después de descansar un poco en el hotel y cenar un buen plato de macarrones a la boloñeas, me dirigí una vez mas al CaixaForum para ver la esperada película mexicana El atentado de Jorge Fons, con un impresionante reparto donde circulan caras conocidas como Daniel Giménez Cacho, José María Yazpik, Julio Bracho, Irene Azuela, Maria Rojo o el visto en Acorazado, Silverio Palacios.

La historia cuenta los hechos del atentado perpetrado en 1897 en contra de Porfirio Díaz, entonces presidente de México, que terminó en un acontecimiento fallido y patético ya que el agresor, Arnulfo Arroyo, se encontraba borracho, no encontró el arma que le dieron y fue atrapado de inmediato.

Tras unos títulos de crédito muy destacables, las expectativas de encontrarnos ante una notable película iban creciendo, quizás por ello la decepción fue mucho mayor. Con una dirección artística (con pinturas al óleo de fondo) notable, una buena banda sonora y unas interpretaciones que, aunque sir ser memorables, si que están a la altura de lo esperado, el gran problema de El atentado lo encontramos en su guión, en el cual se abusa demasiado de largos flashbacks poco interesantes y de una preocupante falta de nervio narrativo. Una de las películas por la que a priori más interés sentía, se convirtió en la película que menos me gusto de todas la que vi. Una lastima.



Acompañando a la película venia un interesante corto de animación boliviano (en coproducción con Dinamarca) llamado Abuela Grillo. Simpático y, quien lo iba a decir, lo mejor de la sesión nocturna.

Para acabar el día, directo al hotel y a dormir, que el día siguiente llegaba John, con el que vería El mural y García, protagonizada por el gran Damián Alcazar a la cabeza.

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