"La novia de Cuba" ha sido la única colaboración entre el cine japonés y el cubano en toda su historia, una cinta que en 1968, cuando la Revolución Cubana estaba aún de moda en todo el mundo, filmó un equipo nipón en La Habana, en coproducción con el Instituto de Cine local (ICAIC), bajo la dirección de Kazuo Kuroki. Ahora la cineasta isleña Mariam García Alam se ha inspirado en esa insólita cinta, para hacer el documental "La novia de Akira", cuya grabación acaba de terminar.
En él se recogen testimonios, documentos y reflexiones sobre la filmación en 1968 de "La novia de Cuba", con presencia en pantalla de los principales participantes cubanos del film. Trabajaron en él, hace 43 años, siete japoneses y otros tantos cubanos, que se bastaron para filmar una “road movie” a lo largo de toda la Isla, con un mínimo de recursos.
Una minuciosa investigación, no exenta de sorpresas, permitió reencontrar y entrevistar a Obdulia Plasencia, una actriz no profesional que encarnó al personaje protagónico femenino de la cinta; a Orlando de La Huerta, productor por la parte cubana; Francisco Miyasaka, cubano-japonés, quien fungió como traductor de toda la producción; a Gloria Lee, actriz secundaria; a Reynaldo Miguel Díaz, que fungía como Director de Producción en aquel momento; a Digna Guerra, quien fuera la interprete de la canción-tema del film y al maestro Roberto Varela, compositor de la canción-tema, "Iré a Santiago", convertida posteriormente en una pieza emblemática de la canción coral cubana.
También fue entrevistado, vía correo electrónico, el afamado actor japonés Masahiro Tsugawa, que interpretó el papel protagónico masculino, “Akira”, un pescador nipón en La Habana, y en cuyo homenaje fue titulado el actual documental.
El trabajo de García Alam es una producción independiente del Grupo de Creación Audiovisual Impulso, con el apoyo del Movimiento Nacional de Video de Cuba y la Fundación Japón. Su culminación está planificada para agosto de este año.
En él se recogen testimonios, documentos y reflexiones sobre la filmación en 1968 de "La novia de Cuba", con presencia en pantalla de los principales participantes cubanos del film. Trabajaron en él, hace 43 años, siete japoneses y otros tantos cubanos, que se bastaron para filmar una “road movie” a lo largo de toda la Isla, con un mínimo de recursos.
Una minuciosa investigación, no exenta de sorpresas, permitió reencontrar y entrevistar a Obdulia Plasencia, una actriz no profesional que encarnó al personaje protagónico femenino de la cinta; a Orlando de La Huerta, productor por la parte cubana; Francisco Miyasaka, cubano-japonés, quien fungió como traductor de toda la producción; a Gloria Lee, actriz secundaria; a Reynaldo Miguel Díaz, que fungía como Director de Producción en aquel momento; a Digna Guerra, quien fuera la interprete de la canción-tema del film y al maestro Roberto Varela, compositor de la canción-tema, "Iré a Santiago", convertida posteriormente en una pieza emblemática de la canción coral cubana.
También fue entrevistado, vía correo electrónico, el afamado actor japonés Masahiro Tsugawa, que interpretó el papel protagónico masculino, “Akira”, un pescador nipón en La Habana, y en cuyo homenaje fue titulado el actual documental.
El trabajo de García Alam es una producción independiente del Grupo de Creación Audiovisual Impulso, con el apoyo del Movimiento Nacional de Video de Cuba y la Fundación Japón. Su culminación está planificada para agosto de este año.
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