miércoles, 3 de agosto de 2011

Llega a las salas chilenas la "biopic" de Violeta Parra


Acaba de ser presentada en Santiago la película chilena de Andrés Wood "Violeta se fue a los cielos", "biopic" de la conocida cantautora y folklorista que perdió la vida de su propia mano en 1967, a partir del libro escrito por su hijo, Andrés Parra. Francisca Gavilán la encarna en esta cinta que se estrenará en salas comerciales el próximo día 11, y después pasará a Chilevisión, convertida en miniserie.

"La película -ha dicho Wood- es muy libre, no está estructurada, es una película muy libre que permite entender, pero se mete en el mundo interior de ella y ese mundo interior y conflictos son totalmente modernos, basta ver que sus canciones, entre comillas, más obvias o más políticas o más o con mensaje más directos parece que fueran escritas ayer y no hace 50 años".

El proyecto ronda los anhelos del autor de "Machuca" y "La fiebre del loco" desde hace casi una década. "Me parece uno de los seres más particulares, propios y originales que ha tenido Chile", decía Wood, y se materializó con la ayuda del guionista cubano Eliseo Antunaga, y el esfuerzo interpretativo de Francisca Gavilán, quien tuvo que empaparse del espíritu, la imagen y la voz de la artista que inmortalizó temas como "Gracias a la vida", "Volver a los 17", "Ayúdame Valentina" o "Rin del angelito".

La preparación de la joven actriz chilena, quien también ha filmado recientemente "Ulises", de Oscar Godoy, pero tiene sobre todo experiencia teatral y televisiva, fue exhaustiva durante casi un año. Se empapó de la música y la actividad artística de Parra (quien llegó a exponer en el Louvre, donde se filmaron escenas del film), y tuvo la oportunidad de trabajar codo a codo con Andrés Parra.

"Las clases -ha dicho Gavilán, quien tuvo que engordar cinco kilos, a La Tercera- fueron bien curiosas, porque empezaron en Santiago, y Angel me tocaba la nariz o la frente dependiendo de dónde necesitábamos que saliera el sonido de la voz. Yo lo miraba y veía la misma sensibilidad que tenía su mamá. Luego, cuando se fue a París, me prestó su charango y hacíamos las sesiones por Skype. Yo debía tocar la guitarra, cantar y afinar instrumentos". Otra de sus obligaciones fue aprender algo de francés para las escenas en las que aparece con el que fuera amante de la folklorista, el suizo Gilbert Favre (interpretado por Thomas Durand).



(Fuente)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy interesante. Ojalá pueda verse en Argentina en cualquiera de las versiones.
rrreeevvv

Anónimo dijo...

Que alegría siento, para que la juventud reconozca su vida y que país tan despiadado tenemos ya que colaboró en gran medida para llevarla al suicidio. Me refiero a los grupos dominantes de la época.De igual modo hubiera muerto de tristeza y continuaría exilida con los miserables que gobernaron luego.

Oscar Quezada.