Bueno, pues ya volvemos a estar aquí. El tercer día de Festival se ha saldado con dos películas, y hoy por fin podemos decir que hemos visto una gran película, la francesa Pequeñas mentiras sin importancia. Pero por desgracia también hemos visto la peor del Festival, para nuestro gusto, hasta el momento, Essental Killing.
A las cinco teníamos la primera sesión del día, la película francesa Pequeñas mentiras sin importancia, dirigida por la estrella del país galo Guillaume Canet, que fue la que inauguró el Festival el pasado viernes.
Todos los años Max, el propietario de un restaurante de éxito, y Véro, su ecológica mujer, invitan a un grupo de amigos a su bella casa de la playa para celebrar el cumpleaños de Antoine y el comienzo de sus vacaciones. Pero este año justo cuando iban a abandonar París su amigo Ludo sufre un serio accidente…
Excelente comedia dramática dirigida por Canet, con un reparto espectacular encabezado por los maravillosos François Cluzet, Marion Cotillard, Benoît Magimel, Gilles Lellouche o Jean Dujardin. Canet presenta una comedia sobre un grupo de amigos que cada año veranean en la costa francesa en la casa de uno de ellos, pero esta vez hay una baja muy importante ya que uno de los integrantes del grupo ha tenido un grave accidente en moto y no puede ir, aún así el resto de amigos deciden irse de vacaciones. Dos horas y media de duración dan respeto, antes de verla daba un poco de miedo pensar que nos podríamos encontrar, pero la verdad es que estos 154 minutos pasan como un suspiro, como si fueran 90, y todo gracias a unas situaciones divertidas, unos diálogos ingeniosos y unos actores en estado de gracia. Y lo mejor es que a pesar de ser una comedia, cuando toca los temas mas dramáticos la película no se resiente y forman un todo de lo mas natural. Empezaba genial el día.
Por desgracia la segunda película de la tarde nos transmitía el efecto contrario, el sopor. No enfrentábamos a Essential Killing, dirigida por el polaco Jerzy Skolimovski.
Excelente comedia dramática dirigida por Canet, con un reparto espectacular encabezado por los maravillosos François Cluzet, Marion Cotillard, Benoît Magimel, Gilles Lellouche o Jean Dujardin. Canet presenta una comedia sobre un grupo de amigos que cada año veranean en la costa francesa en la casa de uno de ellos, pero esta vez hay una baja muy importante ya que uno de los integrantes del grupo ha tenido un grave accidente en moto y no puede ir, aún así el resto de amigos deciden irse de vacaciones. Dos horas y media de duración dan respeto, antes de verla daba un poco de miedo pensar que nos podríamos encontrar, pero la verdad es que estos 154 minutos pasan como un suspiro, como si fueran 90, y todo gracias a unas situaciones divertidas, unos diálogos ingeniosos y unos actores en estado de gracia. Y lo mejor es que a pesar de ser una comedia, cuando toca los temas mas dramáticos la película no se resiente y forman un todo de lo mas natural. Empezaba genial el día.
Por desgracia la segunda película de la tarde nos transmitía el efecto contrario, el sopor. No enfrentábamos a Essential Killing, dirigida por el polaco Jerzy Skolimovski.
Un soldado afgano (Vincent Gallo) es hecho prisionero por las tropas norteamericanas, acusado de haber matado a tres soldados. Posteriormente es trasladado a un país del este de Europa, para ser interrogado. Pero durante el viaje consigue escapar, e inicia así una dramática carrera por su supervivencia en medio de la naturaleza.
Lo primero que nos sorprende es ver que con este papel, Vincent Gallo se llevo la Copa Volpi al mejor actor en Venecia 2010. Por favor, si está de todo menos creíble, tiene la misma cara de palo toda la película y en ningún momento te lo crees en su personaje. Sin ninguna duda, uno de los actores más sobrevalorados por la crítica actual. Pero dejando esto de lado, es que la película tampoco cuenta nada. Tras un comienzo espectacularmente rodado (lo único destacable de la película) un afgano capturado por el ejercito de los Estados Unidos consigue escapar a los bosques helados de un país europeo indefinido tras un accidente con el furgón que trasladaba a los prisioneros. Pues una vez se escapa se acaba la película, el resto minutos y minutos de las mas absoluta nada, solo corre por la nieve, luego anda, se hace unas heridas y mata a un par de hombres, pero todo esto sin historia de fondo, solo vemos lo que va haciendo… pero es que eso no es ni interesante. Y encima el director pierde la lógica ya que por ejemplo, en una escena de las pocas que parecía iban a ser interesantes, un grupo de perros salvajes se cruzan con el protagonistas, tras intentar huir de ellos finalmente cae en la nieve y en ese momento no sabes que harán los perros hambrientos, ¿se lo comerán? ¿cómo saldrá de esta?, pues a saber, porque nosotros nunca lo sabremos, simplemente el director cambia a otra escena y ya está el protagonista haciendo otra cosa… mmmmmm ¿y que paso con los perros? ¿cómo salió del problema?. No se, quizás es que podía pasar algo interesante y se habría cargado la (i)lógica de la película.
Bueno, pues tras una de cal y otra de arena en las películas del día, nos vamos a descansar y mañana más, con otra triple sesión, incluida la primera que veremos de Guy Maddin.
Lo primero que nos sorprende es ver que con este papel, Vincent Gallo se llevo la Copa Volpi al mejor actor en Venecia 2010. Por favor, si está de todo menos creíble, tiene la misma cara de palo toda la película y en ningún momento te lo crees en su personaje. Sin ninguna duda, uno de los actores más sobrevalorados por la crítica actual. Pero dejando esto de lado, es que la película tampoco cuenta nada. Tras un comienzo espectacularmente rodado (lo único destacable de la película) un afgano capturado por el ejercito de los Estados Unidos consigue escapar a los bosques helados de un país europeo indefinido tras un accidente con el furgón que trasladaba a los prisioneros. Pues una vez se escapa se acaba la película, el resto minutos y minutos de las mas absoluta nada, solo corre por la nieve, luego anda, se hace unas heridas y mata a un par de hombres, pero todo esto sin historia de fondo, solo vemos lo que va haciendo… pero es que eso no es ni interesante. Y encima el director pierde la lógica ya que por ejemplo, en una escena de las pocas que parecía iban a ser interesantes, un grupo de perros salvajes se cruzan con el protagonistas, tras intentar huir de ellos finalmente cae en la nieve y en ese momento no sabes que harán los perros hambrientos, ¿se lo comerán? ¿cómo saldrá de esta?, pues a saber, porque nosotros nunca lo sabremos, simplemente el director cambia a otra escena y ya está el protagonista haciendo otra cosa… mmmmmm ¿y que paso con los perros? ¿cómo salió del problema?. No se, quizás es que podía pasar algo interesante y se habría cargado la (i)lógica de la película.
Bueno, pues tras una de cal y otra de arena en las películas del día, nos vamos a descansar y mañana más, con otra triple sesión, incluida la primera que veremos de Guy Maddin.
1 comentario:
A mi me encantó la francesa y de Essential Killing había oído hablar muy bien, así que me sorprende tu crítica tan negativa. Si la veo ya te diré. Hoy creo que iré a ver Cold Weather, pero lo tendré que decidir en el último momento. El miércoles si que creo que veré un par. Ya te lo diré y si estás por ahi nos vemos. Un abrazo.
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