miércoles, 27 de octubre de 2010

Festival de Cine fantástico de Sitges 2010: Entrevista a Nicolás Goldbart, director de Fase 7


Foto: Cine Latino

Con esta entrevista realizada a Nicolás Goldbart, director y guionista de Fase 7, por la que ganó el premio al Mejor guión en el pasado Festival de Sitges, terminamos la cobertura dedicada al mismo. Esperamos volver de nuevo el año que viene con mucho y, sobre todo, buen cine.


Para empezar, tú tienes una carrera consolidada como montador ¿siempre habías querido dirigir una película o surgió con el tiempo?

Siempre, pero una película lleva a la otra y aparte no terminaba de tener un guión, entonces pasaba el tiempo. Mi idea nunca fue ser montajista cuando empecé a estudiar, pero mi facilidad y mi orientación iba para ese lado. Entonces intenté escribir hasta que bueno, por ahí uno está maduro y las cosas llegan, pasa el tiempo y llegan más tarde. Pero sí, siempre.

En la presentación de la película has afirmado qué es la primera vez que se proyecta con público ¿Cuándo tiene previsto el estreno en Argentina?

Tal vez para enero de año que viene, todavía no está muy definido, primero vamos al Festival de Mar de Plata, eso es todo lo que sé con certeza

¿No hay firmado nada de derechos para el extranjero?

Todavía no hay nada firmado.

Has enfocado la historia hacia el humor en lugar del terror, ¿por qué motivo?

Primero porqué tenía ganas de hacer una comedia. Segundo, porqué lo que vi que pasaba con la Gripe A era terrible pero el elemento de humor me parecía inevitable, había situaciones siniestras por lo qué pasaba con la gente pero al mismo tiempo eran absurdas y graciosas. Hubo un micro que apedrearon que llegaba de Chile a la Argentina porqué había una persona infectada y para que no llegara la gripe apedrearon el micro creyendo que eso evitaba que llegara la gripe, el miedo al cerrar los aeropuertos, cosas inútiles y absurdas pero que al mismo tiempo cuando la gente se transforma en turba hay que esperar comportamientos irracionales que me parecía que aparte de ser terribles eran graciosos. A mi me pasó, yo estaba en una sala de espera en la época de la gripe, empecé a toser y la gente se empezó a levantar, es como que la gente dejó de lado la solidaridad, todo, la supervivencia propia era lo único que importaba. Hoy estamos todos juntos hasta que uno está infectado y listo, no estás más con nosotros.

Sin duda en la película hay dos personajes más carismáticos que el resto, por los diálogos, actuaciones, etc… Horacio (Yayo Guridi), el vecino y Zanutto (Federico Luppi), que son antagónicos , ¿en qué te basaste para estos personajes?

El personaje de Horacio es lo que uno quiere ser y no se anima. Es el que dice las cosas de frente, es de armas tomar, el hombre de acción, ese que uno cuando ve una película de acción es el que quisiera ser pero en la vida real es un cobarde. Y el personaje de Luppi es jugar un poco con la imagen que tiene él y al mismo tiempo, no sé, hay elementos por ahí que he tomado de muchos lados, como le habla al personaje de (Daniel) Hendler, un poco está tomado de cómo mi suegro me habla a mi. Es un poco jugar con esa imagen que viene de Luppi de antes que es la de hombre duro, lo primero que quise hacer para que fuera gracioso es desarmarlo para volver a construirlo, mostrarlo vulnerable con un perrito chihuahua, un pañuelito y resfriado para que después resurja con la escopeta, etc… Pero digamos el personaje que viene de ahí de la fantasía y el imaginario cinematográfico. El de Horacio también viene del imaginario cinematográfico pero es como la otra cara de la moneda que a uno le gustaría ser y no se atreve.

¿El papel de Zanutto fue pensado para Federico Luppi?, ¿lo tenías en mente cuando lo hiciste?

Fue pensado en él pero nunca pensé que iba a tenerlo y cuando lo tuve fue algo que no me podía creer, no podía dormir..

¿Cómo se consiguió a Luppi para el proyecto?

Le mandé el guión por medio de Daniel Hendler, justamente me comentó él que el papel era para Luppi sin que yo le dijera nada, y yo le dije que había que conseguir a alguien que se pareciera porqué la película era un proyecto muy chico y Federico Luppi es una estrella. Entonces dijo que le iba a mandar el guión porque le iba a gustar y lo iba a querer hacer y consiguió el mail. Luego le contestó que le mandara el guión, se lo mandó el guión y durante un tiempo no tuvo respuesta hasta que yo le volví a escribir un mail preguntándole si lo había podido leer, yo ya estaba buscando reemplazo en ese momento, y me contestó que le había encantado, que le hacía recordar esto y lo otro, y yo no lo podía creer. Tuvimos una reunión, me midió, a ver de quién se estaba poniendo. Yo estaba muerto de miedo pero después nunca me hizo sentir que yo era un principiante, estuvo a disposición en todo momento, la verdad fue un caballero. Fue un honor tenerlo en la película y todavía no lo puedo creer.

Por fin empezamos a ver películas de contagios, de supervivencia de lugares que no son Estados Unidos y que resultan creíbles y bien realizadas. ¿Tú crees que esto puede ser una tendencia en el futuro para el cine latinoamericano?

No pasa por la capacidad, porqué la hay en la Argentina, yo puedo hablar de la Argentina, no sé el resto de lugares pero estoy seguro de que también. Hay técnicos de primera, el tema es la intención de los directores, si los productores también ven que es posible y empiezan a buscar este tipo de proyectos, pero eso si a la película le va bien, todavía no sabemos como va a ir comercialmente. Yo que es muy posible, la capacidad técnica está, el talento también, hace ya tiempo que en la Argentina se dio un salto de calidad muy grande en tecnología o escuelas de cine, se abrió mucho el mercado de la publicidad y eso hace que los técnicos tengan mucho tratamiento. Directores que tengan ganas de explorar el género los hay, por ejemplo Damián Szifron, que estrenó acá Tiempo de valientes, es un director que se dedica al género, yo no sé si está interesado en la ciencia ficción pero es posible. Hay mucha marginalidad pero en el buen sentido, hay mucho cine fantástico, hay productoras muy chiquitas que hacen cine fantástico pero todavía no hay mucha experiencia, no hay mucha tradición de cine fantástico pensado para la sala grande, pero a lo mejor si esta película funciona los productores empiezan a mirar hacia allá y mover ese tipo de proyectos. La capacidad técnica en cuanto a que una película se vea como una película eso no falta.

Te lo comentaba porqué una situación como la de la gripe A, por ejemplo, puede pasar en cualquier parte del mundo pero estamos acostumbrados, quizás por vicio del espectador, a que todo transcurra en Estados Unidos, puede pasar en Boston pero no en Buenos Aires.

Si, siempre los platillos volantes aparecen en Nueva York. De hecho, en la Argentina hay una tradición más de la historieta de ciencia ficción, mi película tiene algo de El eternauta, que es muy conocida, como los trajes esos que llevan puestos los personajes. También hay una película muy importante que se llama Invasión de (Hugo) Santiago, (Jorge Luis) Borges y (Adolfo Bioy) Casares. Pero son como experiencias aisladas y la industria está más bien orientada hacía otras cosas. Ojala se puedan ver más porqué a mi me gusta ver esto más que lo otro, en el circo tiene que haber de todo.

¿Cuál es la situación de la industria cinematográfica en Argentina hoy en día?

Mira, yo no soy muy especialista en eso. Sobre todo porqué mi trabajo como montajista siempre me mantiene encerrado en el estudio. Dicen que el cine no se podría estar peor pero la verdad es que no puedo decir si está bien o está mal. En cuanto a las películas que se están haciendo me parece que se está bien, de hecho, una película argentina ganó el Oscar, te puede gustar más o menos pero es una película hecha por técnicos argentinos y está al nivel de otras y puede ser exhibida en cualquier parte. En términos de cómo está la industria la Argentina es la Argentina, un día está increíble y al otro día es un desastre. Es así.

¿Y cine de otros países latinoamericanos llega a Argentina?

Si, más o menos. El cine americano (Estados Unidos) invade todo, lo que llega del cine latinoamericano son cosas en salas especiales o algunas cosas que tuvieron mucha repercusión mundial. La verdad es que no por estar al lado de Chile se estrenen películas chilenas o por estar al lado de Brasil se estrenen películas brasileras. El cine americano tiene copada la distribución y la exhibición.

¿Tienes algún proyecto en mente?

No, tengo un proyecto que es anterior a este que no sé que va a pasar, se llama Visitor, sobre un argentino al que Inmigración detiene en un aeropuerto de Estados Unidos y la burocracia lo va enterrando, pero en realidad no tengo un plan.

¿Vas a seguir montando películas para otros?.

Si, porqué tengo que trabajar para vivir, de momento ser director de cine me dejó más pobre de lo que era. No puse dinero mío en la película pero uno tiene que mantenerse mucho tiempo. La película me llevó un año y ese tiempo uno tiene que dedicarlo a la película y no necesariamente le da lo necesario para vivir.

De los directores para los que has montado películas, ¿con cual te quedas?

De todos he aprendido cosas, por ahí hay películas que no me gustan tanto pero el trabajo fue más rico, hay películas que uno en el momento no las disfruta. Me gustó mucho hacer El custodio de Rodrigo Moreno. El bonaerense fue otra película que en su momento fue muy difícil de hacer porqué había que trabajar muy rápido, con mucha presión, pero fue un trabajo que me gustó hacer. No evito películas que no tengan algo que me interese, elijo más o menos, trato de elegir pero a veces me he comido de todo. Pero como dije antes, El custodio es la película en la que más pude entrar en comunión con el proyecto y con el director.

Y qué referentes cinematográficos tienes.

Me gustan Carpenter, Leone, Kubrick, John Ford, Romero. Me gusta el género y me gustan los directores que lo usan como medio para contrabandear algo más, no el género por si solo sino como una herramienta para meter algo por abajo. De los directores me quedo con Carpenter, cuando tengo alguna duda veo una película suya.

Si hubiera una oferta interesante, ¿darías el salto a EEUU o prefieres quedarte en Argentina?.

No sé, no te sé decir, es difícil, porqué tengo familia y no es algo sencillo de hacer y aparte trabajar en Estados Unidos sé que es muy duro. Tendría que evaluarlo antes, el hecho de tener una hija y sacarla del jardín, alejarla de los abuelos, es complicado pero habría que pensarlo, la verdad es esa.

Y la última pregunta, pero relacionada con la anterior, ¿qué dirías si quisieran realizar un remake de tu película?

Por un lado, si me pagan, encantado y por el otro lado me divertiría mucho ver que hace otro director con mi material. Creo que es algo interesante, no me parece que me esté vendiendo ni regalando mi película, ya existe y va a tener su recorrido por si sola, otra Fase 7 sería bienvenida.

Pues muchas gracias, Nicolás.

De nada, un gusto.

3 comentarios:

Alberto Romo dijo...

¡Felicidades!¡Gran cobertura del festival! Escribí un artículo para Judex Fanzine sobre el fantástico latino en el certámen: http://www.judexfanzine.net/v3/fitxa.php?id=1554. ¡Me han servido vuestras entrevistas y comentarios, gracias!.
También grabé y edité un video con las declaraciones que hicieron los directores de américa latina presentes en la sala Tramuntana: http://www.vimeo.com/16346848. Si les gusta, pueden embeberlo en su blog.
Suerte con el Blog, es tan interesante como necesario.

Daniel Gálvez dijo...

Hola Alberto, muchas gracias por seguirnos y por tus felicitaciones!!, he visto tu articulo y está muy bien. El video me lo miro luego.

Gracias y saludos compañero ;-)

Alberto Romo dijo...

¡Gracias a ustedes! Estoy planteandome escribir un estudio más extenso sobre el nuevo cine fantástico latinoamericano, también para Judex. Si se confirma, ¡seguro les comento y les consulto en breve!