miércoles, 12 de octubre de 2011

Crónica del Festival de Cine Fantástico de Sitges 2011 - Día 6

Sexta jornada y hoy tres películas mas, dos asiáticas, Hara-Kiri y The Yellow Sea y una norteamericana, The Woman. La valoración, un día mas, es simplemente interesante. Vamos con lo visto:



HARA-KIRI: DEATH OF A SAMURAI: El genial Takashi Miike regresa a Sitges con una película que entronca con 13 asesinos: un elegante filme de época, de acción contenida y explosiones de violencia controladas con maestría. Ichimei narra la historia de Hanshiro, un samurai que llega a la residencia de un clan con la intención de terminar con su vida llevando a cabo el ritual del harakiri. El líder del clan intenta disuadirlo contándole la trágica historia de Motome, un joven que, poco tiempo atrás, llegó a ese lugar con las mismas intenciones. Miike construye un filme en tres dimensiones que, a través de flashbacks, se adentra en el terreno del amor y de la venganza.

La nueva propuesta del inclasificable Takashi Miike, llega a Sitges tras pasar por la sección oficial del último festival de Cannes. Lo primero que me gustaría comentar es que el 3D de Hara-kiri es el más inútil e innecesario que he visto, ya que no solo no lo aprovecha ni un minuto de metraje, si no que encima provoca que las gafas molesten y oscurezcan más que nunca. Dejando este tema más técnico a un lado, la nueva película de Miike es sin duda las mas académica de su larga filmografía. Con casi dos horas a un ritmo extremadamente pausado y en el que se nos cuenta en clave flashbacks el porque los personajes principales acaban como nos muestra el principio del film. Toda esta parte es bastante cansina y poco original. Solo en los últimos 15 minutos se asoma el Miike que conocemos, aunque incluso en estos últimos minutos donde podemos ver los únicos momentos de acción de la cinta, la cosa esta bastante contenida. En fin, película con bastante poca personalidad, cosa rara viniendo del director japonés.


THE WOMAN: Christopher Cleek es un abogado y modélico padre de familia cuyas virtudes serán puestas a prueba tras su encuentro con una mujer salvaje que vive en los bosques cercanos a su casa de campo. Pese a la violenta actitud de esta, Christopher intentará “civilizarla”, arriesgando las vidas de su propia familia, que pronto descubrirá lo que se oculta tras esta mujer. Con esta brutal The Woman, Lucky Mckee y el polémico novelista Jack Ketchum quieren poner a prueba la resistencia del espectador ante el terror más extremo. Así lo expresa su director al declarar sus intenciones: “os vais a cagar de miedo”. Se puede decir más alto (y de forma más sutil) pero no más claro.

Hace 9 años llegó a Sitges la ópera prima de un director llamado Lucky McKee, la película en cuestión se llamaba May, y se puso al público en el bolsillo. Ahora, después de estos 9 años y un par de fallidas cintas en su haber, McKee vuelve para intentar levantar cabeza y volver a hermanarse con el público, y opinión personal a parte, parece que lo ha conseguido ya que The Woman ha sido una de las películas más aplaudidas y mejor valoradas por el público, o eso al menos se huele en el ambiente. Personalmente me parece una gamberrada interesantes, con una primera parte bastante flojita (demasiado común por el momento en el festival de este año), pero con unos últimos 20-25 minutos demenciales y muy divertidos, con alguna escena sorprendente y enfermiza por momentos, sobre todo cuando el personaje de Christopher pierde completamente el raciocinio.



THE YELLOW SEA: En la frontera entre las dos Coreas y Rusia, la mitad de la población vive de actividades ilegales. Un taxista lleva tiempo sin ver a su mujer, que se ha ido a Corea del Sur en busca de una vida mejor. La única solución pasa por aceptar un trato que le han propuesto: lo ayudarán a cruzar la frontera a cambio de que cometa un asesinato. Na Hong-jin, director de The Chaser, regresa con un thriller de acción sin tregua y discurso social, a la manera del mejor Michael Mann. Un filme oscuro y de secuencias espectaculares que actualiza el cine negro y que arrastra al espectador por los derroteros de la alta tensión.

Segunda película del director Na Hong-jin, triunfante con su ópera prima The Chaser, The Yellow Sea es una correcta pero artificiosa propuesta del subgenero del thriller coreano, tan en boga en los últimos tiempos gracias a obras de gran calado como Oldboy y coetáneas. Con una duración quizás extrema, 140 minutos, eso a pesar de que la versión coreana dura 19 minutos más, que convierte la película en excesiva, no deja de tener sus puntos de interés, gracias a una cuidada coreografía de acción. Una de las decepciones más grandes de la película se encuentra en el recuerdo de la anterior, algo mejor que esta y que hacía tener unas esperanzas grandes. Uno de los platos fuertes, además de las escenas de violencia es su ambientación, solo al principio, en una zona de China, de mayoría coreana, no explotada cinematográficamente. Lamentablemente la acción se traslada enseguida a Corea y se pierde ese elemento diferenciador que añadia un toque diferente. Al final la sensación que queda, a pesar de su gráfica violencia, es de cierta moralina y moraleja final que no añade más que confusión sobre lo que hemos visto. Algo por otra parte más común de lo que parece en el cine de hoy en día.



Y maña en teoría empezamos con Shaolin, seguimos con Sleeping Beauty y acabamos con The Raid. Quizás se pueda añadir algo mas, o hay algún cambio de última hora. Así se afronta el festival, predispuesto a los cambios continuos. Hasta mañana!!!

2 comentarios:

Josepe Machado dijo...

The woman no es una gran película pero como me reí con el final bizarro que tiene la película. Es cierto que Hara-kiri probablemente sea la película más convencional de Miike, a mi su drama me gustó aunque tampoco es que sea nada del otro mundo. Un abrazo!

Sandra Mantas dijo...

No vi Hara-kiri, pero The Woman me pareció patética y el final me parece una forma de justificar por la vía de la provocación la falta de talento de su director. Y The Yelow sea me gusta durante una hora, y mucho, y me aburre aún más el resto. Y estoy de acuerdo en que The Chaser era mejor. Un abrazo.